Espacio líquido de creación y crítica literaria. Marcelo Matas de Álvaro

sábado, 7 de agosto de 2010

Con el corazón en un puño


PALABRAS ENVENADAS
Maite Carranza
Editorial Edebé. 2010
288 páginas



“Palabras envenenadas”, de Maite Carranza (Premiado con el Edebé de Literatura Juvenil) narra la historia de la desaparición de Bárbara Molina, una adolescente que, después de cuatro años de infructuosas pesquisas en las que prácticamente se da el caso por cerrado, logra comunicarse con el exterior de su cautiverio. Esto ocurre el día en el que Salvador Lozano, el inspector de policía que ha investigado su desaparición, se jubila, y es entonces, en medio de la frustración por no haberlo solucionado y por las emociones debido a los preparativos de su marcha, cuando el agente debe enfrentarse a la nueva situación de resolver por fin el caso, justo antes de las doce de la noche, momento en que dejará de ser policía para siempre. De esta forma, asistimos a un thriller contra reloj, pues al tiempo que se acerca la medianoche, la familia, el inspector, el secuestrador y la propia joven se acercan vertiginosamente al angustioso desenlace de los cuatro años en los que ha estado desaparecida.

Maite Carranza trama un relato trepidante que no desmerece de los mejores del género, con una original estructura en la que, bajo el nombre de cada uno de los protagonistas, los capítulos van contando desde sus orígenes las circunstancias de la desaparición de Bárbara, sus amistades peligrosas, los problemas con su familia, su despertar sexual, las líneas de investigación que se fueron siguiendo y que, a los ojos del lector, se van convirtiendo sucesivamente en pistas falsas que le llevan, como si fuera el mismo inspector, a descartarlas una a una. Los diálogos se integran en la prosa narrativa para dar más agilidad a la trama y el manejo del monólogo interior y del estilo indirecto libre hace que el lector se acerque, emocional e intelectualmente, a la peculiar psicología de los personajes.

Se trata de una magnífica novela que se introduce en el espinoso tema de los abusos sexuales a menores, aquellos de los que a menudo son víctimas por parte del entorno que tienen más cerca. Su lectura es muy recomendable para los adultos, a veces ciegos a los problemas que sus hijos esconden y, por supuesto, para los jóvenes (a partir de 16 años), sobre todo de los que gusten de historias intensas que se leen con el corazón en un puño.


(Publicado en el suplemento Culturas de El Comercio y La Voz de Avilés. 7 de agosto de 2010)